Carta Pastoral del Cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona *y presidente de la CEE
Hace ya más de año y medio que estamos viviendo los efectos de la pandemia de la Covid-19. Han sido muchas las personas y las familias que han sufrido y están sufriendo en primera persona los efectos más nocivos de este virus. Los hospitales, los centros de atención primaria y todos los profesionales que trabajan en ellos, han hecho y siguen haciendo un esfuerzo ingente que nunca les podremos agradecer lo suficiente.

La Iglesia, en colaboración con las administraciones públicas y con otros agentes sociales, ha sido muy activa en la atención y en el acompañamiento a los enfermos, a los difuntos y a sus familiares. Hemos trabajado para mantener viva la esperanza de los ciudadanos con el mensaje del Evangelio que nos ha confiado Jesucristo. Y ahora, más que nunca, trabajamos para atender con mucho afecto a los hermanos y hermanas que se dirigen a nuestras parroquias, comunidades o instituciones, pidiendo ayuda económica o espiritual para poder avanzar con más serenidad en medio de la grave crisis social y económica provocada por la pandemia.
Aunque parece que nos estamos recuperando, para muchas familias las consecuencias económicas son críticas. Hace ya meses que las diferentes entidades sociales de la Iglesia, encabezadas por las Cáritas diocesanas y parroquiales, ven cómo familias enteras tienen serios problemas para vivir dignamente.
Ante esta situación, la gran familia de la Iglesia que peregrina en la diócesis de Barcelona quiere continuar esta necesaria misión al servicio de las comunidades cristianas con una atención especial a los más afectados por esta crisis. Durante el último año las colectas parroquiales han disminuido considerablemente, lo que ha provocado graves dificultades para el sostenimiento económico de algunas de nuestras parroquias y centros de culto, espacios desde donde la Iglesia desarrolla su misión espiritual, asistencial y misionera. Queremos seguir atendiendo a todos los que necesitan ayuda y luz en su camino