Informa: @paco_gil
Será la noche del 28 al 29 de junio en la Parroquia de Santa María de las Virtudes de Villamartín
La Adoración Nocturna es una Asociación de fieles aprobada por la Conferencia Episcopal española, que tiene como principal objetivo alabar, bendecir y adorar a Cristo presente en la Eucaristía.
Existen en España unas 1.500 Secciones con unos 80. 000 miembros, tanto de mujeres (A.N.F.E) como de hombres (A.N.E). Se reúnen una vez al mes y hacen, durante la noche, turnos eucarísticos de una hora, celebrando una vez al año, cerca de la estación veraniega, todas las Secciones juntas la «Fiesta de las Espigas». En la Diócesis de Asidonia-Jerez existen cuatro Secciones, implantadas en El Puerto de Santa María, Villamartín, Jerez de la Frontera y Chipiona, siendo el director de todas ellas el párroco de Villamartín, Don José Manuel Álvarez Benítez.
Esta fiesta de las Espigas, es la que se celebra, para toda la Diócesis en Villamartín, la noche del 28 al 29 de junio. La recepción de los adoradores será en la Capilla de Las Angustias alas 22:30 horas. A las 23:00 horas se celebrará la procesión de las Banderas hasta la Parroquia de Santa María de las Virtudes, para empezar a las 23:15 con las Vísperas y la celebración de la Eucaristía. La Vigilia finalizará en torno a las 3:00 horas del 29 de junio, y se mantendrá una convivencia en el Atrio, donde se degustarán chocolate, café y pastas (1).
Esta Asociación nació de manera oficial en España en 1887, fundada por Luis Trelles Noguera (lucense de Viveiro, donde nació en 1819), quien había conocido la Asociación en París, donde el músico hebreo Herman Colieu la había fundado.
La Adoración Nocturna fue fundada en la ciudad sanluqueña en 1901, conservándose recuerdo gráfico de las efemérides de las Bodas de Plata, celebrada en la explanada del Convento de los PP. Capuchinos con la presidencia del arzobispo de Santo Domingo. Existió con mucha pujanza en la ciudad durante muchos años, teniendo su sede en la Basílica de Nuestra Señora de la Caridad. Incluso los Hermanos de las Escuelas Cristianas alentaron, al inicio de la década de los 50, una versión infantil de esta Asociación con la implantación de los niños tarsicios.
(1) Narciso Clement