Perdonar, pedir perdón, dar las gracias, decir te quiero y decir adiós tiene gran relevancia ante la muerte
Fuente: Forum libertas
Todos tenemos que pasar por ese trance antes o después, y saber decir «adiós» a este mundo ligeros de equipaje no es tarea fácil. En ese sentido, Julio Gómez, especialista en cuidados paliativos, considera que perdonar, pedir perdón, dar las gracias, decir ´te quiero´ y decir ´adiós´ son tareas básicas en la vida que, ante la proximidad de la muerte, toman una especial relevancia.
Así lo explica Gómez en su libro La hora de la verdad. Los asuntos que no debes dejar pendientes (Plataforma Editorial, 2014), en el que recoge su experiencia profesional y con el que pretende que la despedida deje también un poso positivo en los familiares, al mismo tiempo que quien nos deja lo haga de la forma más serena posible.
Cabe resaltar que Julio Gómez es médico paliativista con una experiencia de 12 años en el servicio de cuidados paliativos del Hospital San Juan de Dios de Santurce (Vizcaya) y ha escrito este libro con el objetivo de que fuera una ayuda para acercarse al final de la vida de forma más serena y más tranquila.
Según apunta Gómez, señala que el libro puede ser también de utilidad para los profesionales sanitarios que acompañan a sus pacientes en esta situación ya que en ocasiones no saben cómo profundizar en el tema de la reconciliación vital antes de la muerte porque son lugares en los que ellos mismos no desean adentrarse.
«Vivimos al día, corriendo siempre, de prisa, dando por supuesto muchas cosas, creemos que con saber que nos quieren y querer a los más cercanos ya no es necesario decirlo, sin embargo es muy gratificante escuchar al ser querido decirnos que nos quiere y resolver las pequeñas rencillas sin dejar pasar la oportunidad porque si no se van creando grandes distancias», apunta Gómez.
Cinco tareas ante la muerte:
- Perdonar: Rencor, enfados e ira generan conflicto interior y angustia que tras la conciliación ayudan a liberarnos de una pesada carga emocional.
- Pedir perdón: El hecho de pedir perdón supone también reconocer que se ha errado y una forma de pacificar esa parte o partes de la vida.
- Agradecimiento y reconocimiento: De aquello que hemos vivido, porque dentro del dolor del duelo la familia conservará experiencias y recuerdos compartidos que dejarán un poso positivo.
- Expresión de los afectos: Es importante decir con claridad y con palabras a quienes amamos que los queremos, se cierra un ciclo vital en el que necesitamos decir lo que sentimos y que nos lo digan.
- Despedida: Hay que despedirse para irse ligero de equipaje, Gómez señala que es como dejarse caer sin tensiones, un tránsito que se realiza en otra actitud y sin duda de mejor forma
«En los últimos momentos suele existir insuficiencia cerebral y todos los diques que contienen lo más primario se rompen, por lo que si hay asuntos no elaborados se puede producir un delirio agitado que suele obligar a la sedación», aclara Gómez, que advierte así de cómo tener asuntos pendientes produce más agitación en el final de la vida y una despedida más dramática.
Para él, una buena despedida no sólo es mejor para quien nos deja sino también una ayuda en el duelo para los seres queridos.
Por su parte, los más cercanos deben ayudar a su familiar en esta reconciliación final no rehuyendo la conversación con comentarios como «no te despidas, no pienses en ello» sino que aunque produzca dolor hay que ayudar a que realice todas estas tareas para que existan también en estos momentos emociones positivas.
«A la hora de la verdad hay tiempo para arreglar las cosas pendientes y conseguir así que ese final llegue en paz», concluye Gómez.
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