Informa A. Romero La Voz.
Han repartido regalos para 400 niños a través de Asuntos Sociales para que la ilusión llegue a todas las casas de la localidad en un día tan especial como hoy
Que la ilusión no falte en ningún hogar de Prado del Rey mañana y que ningún niño se quede sin juguetes. Ese es el objetivo que se han marcado un grupo de jóvenes de Prado del Rey que, por segundo año consecutivo, han puesto en marcha una iniciativa para conseguir juguetes que se distribuirán a través de Asuntos Sociales entre las familias con mayor necesidad y fondos que se destinarán a asociaciones y colectivos de la localidad que lo necesitan.
El año pasado se recogieron tantos juguetes, 300 unidades, que incluso se pudieron entregar algunos a familias de la localidad de El Bosque y este año esa cifra se ha superado con creces, alcanzando los 400 juguetes. El acto central de recogida fue una gala que se celebró el pasado día 27 de noviembre en el Teatro Municipal, que fue donde se recogieron la mayoría de los obsequios que ya se encuentran en manos de las familias para que hoy sean desenvueltos por quienes los disfrutarán.
En la gala colaboró, actuando desinteresadamente, la compañía teatral infantil La Pecera que hicieron disfrutar, sobre todo, a los más pequeños que asistieron a la misma. Una de las notas musicales de la noche la firmó el grupo pradense de rock Malhabares. Esta actuación fue muy esperada ya que tras dos décadas juntos cantando, llevaban un tiempo apartado de los escenarios y quisieron volver para colaborar con tan bella iniciativa.
El cantautor también pradense Fan Mariscal, también protagonizó uno de los momentos más emotivos de la noche, ya que junto a La Banda del Desván dedicó su actuación al recientemente fallecido José Toro, para el que tuvo unas emotivas palabras recordando que «gracias a él estoy aquí esta noche y mi vida gira en torno a la música porque me enseñó solfeo y a tocar el saxofón», añadiendo que «si no hubiese sido por el maestro Pepe Toro ni cantaría ni tocaría la guitarra y, seguramente, me dedicaría a otra cosa y mi vida sería totalmente distinta».